Guía práctica de cuidados para una piel saludable y naturalmente protegida 

Limpia tu piel a diario
Un buen cuidado de la piel siempre debe iniciar con una limpieza total del cuerpo entero. La manera más fácil de hacerlo es con un baño usando los productos adecuados. El jabón Protex^® PRO Regeneración¹ ayuda a recuperar el daño de la piel provocado por la resequedad gracias a su fórmula con colágeno y óleo de linaza.

Ya sea en su presentación en barra o jabón líquido, Protex^® PRO Regeneración¹ la regeneración natural de la piel y elimina 99.9% de las bacterias² naturalmente. Úsalo todos los días durante el baño.

Hidratación en todo momento
Tu piel necesita agua para tener un buen funcionamiento. Hidratarse con alrededor de 1.5 y 2 litros de agua (lo que equivale a 8 y 10 vasos) es fundamental para tu salud en general, ya que este líquido ayuda a que la sangre transporte oxígeno, y el nivel de energía aumenta cuando el cuerpo está bien hidratado. 

Pero beber agua no es la única manera de hidratar la piel, también puedes hacerlo con productos como cremas y sueros, y hasta con el consumo regular de frutas ricas en agua, como la sandía, el melón y la fresa.

Exfolia tu piel
Otra manera de cuidar la piel de tu cuerpo y ayudar a su restauración natural es mediante la exfoliación. Este proceso renueva tu piel al eliminar células muertas que se acumulan por todo tu cuerpo, también limpia a profundidad y retira la suciedad y grasa para evitar que tus poros se tapen.

De acuerdo con información de Global Health Center of MSSM, la exfoliación acelera la renovación celular. Eso sí, ten en cuenta que este proceso solo se recomienda hacerlo una o dos veces por semana, de lo contrario puedes dañar tu piel.

Usa protector solar
Lo repetiremos hasta el cansancio: el protector solar se aplica diario y en todo el cuerpo. No importa si el día está nublado o si te tienes que quedar en casa, aún cuando no tengas que salir a la calle, estás expuesto a la luz azul que sale de las pantallas, como la de tu teléfono o la de tu computadora. 

Esta luz artificial también emite rayos UV que pueden tener un impacto directo en la salud de tu piel y provocar manchas, resequedad y envejecimiento prematuro. Ya sea dentro o fuera de casa usa un protector solar con SPF 50 y, de ser posible, evita el sol entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, cuando los rayos solares son más intensos.

Aliméntate sanamente
Una alimentación balanceada es una de las claves para tener la piel y el cuerpo sanos. El consumo de frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras es básico, pero entre toda esta variedad te recomendamos los alimentos ricos en antioxidantes, vitaminas y grasas saludables ya que ayudan a la regeneración de la piel.

Evita los alimentos muy procesados, fritos o altos en grasas saturadas. Recuerda mantener un equilibrio en lo que comes y así podrás ver los resultados en tu piel.

Practica ejercicio
Además de llenarte de energía y producir endorfinas que mejoran tu estado de ánimo, el ejercicio también es benéfico para la salud de la piel. Esto sucede porque el deporte estimula la circulación sanguínea, y eso hace que la piel reciba más oxígeno y nutrientes, mejorando su brillo y apariencia.

Cuando haces ejercicio y te mantienes activo, eliminas toxinas de tu organismo y esto hace que tu piel se vea bonita y saludable.  

Duerme lo suficiente
Un buen descanso es primordial para tener energía todo el día y poder hacer nuestras actividades sin ningún problema. La mayoría de los adultos necesitamos entre 7 y 8 horas de sueño por las noches para mantener el cuerpo y la mente sanos.

Las ventajas de un buen sueño también se reflejan en la piel, si duermes lo suficiente evitarás que se formen las famosas ojeras, esa pigmentación oscura debajo de los ojos  que a nadie le gusta tener.  

¹Ayuda a regenerar la hidratación natural de la piel.
²Probada: E. coli. En Paraguay y Chile: Ayuda a eliminar el 99,9% de las bacterias.