Por qué exfoliar el rostro

Girl with a tower in front of a mirror on a bathroom

Además de la limpieza y de la hidratación, la rutina de cuidados faciales puede incluir el uso de exfoliante en el rostro una o dos veces por semana, dependiendo del tipo de piel. El proceso es útil porque promueve una limpieza más profunda y estimula la renovación celular, dejando la piel más radiante y saludable. Sin embargo, la exfoliación no debe realizarse en caso de que la piel esté lastimada o con espinillas inflamadas. Vea cómo y por qué exfoliar la piel del rostro.

Beneficios de la exfoliación – Al limpiar la piel profundamente, el exfoliante remueve el exceso de sebo acumulado en los poros y elimina células muertas, lo que ayuda a evitar la formación de clavos y espinillas. El procedimiento también estimula la producción de nuevas células, lo que deja la piel más suave, lisa y con un aspecto más homogéneo.

Frecuencia de la exfoliación – Quien tiene la piel muy oleosa puede exfoliar el rostro dos veces por semana. Cuando la piel es normal o más seca, una vez ya es suficiente. Más que eso puede causar rasquiña, enrojecimiento, sequedad y el efecto rebote, que ocurre cuando el organismo produce más sebo para compensar el resecamiento.

Cómo exfoliar – El producto debe aplicarse en la piel húmeda, con movimientos suaves y circulares. Quien tiene la zona T (frente, nariz y quijada) más grasosa puede hacer una ligera presión en esa región, teniendo cuidado de no lastimar el área. Después, deje el producto en la piel durante 2 a 3 minutos, tiempo suficiente para que los principios activos puedan actuar. Enjuáguese enseguida con agua fría y abundante.

Cuidados después de la exfoliación – La piel, después de la exfoliación, queda un poco resecada, por eso debe hidratarse inmediatamente después del procedimiento. Eso vale para todos los tipos de piel. En el caso de las más oleosas, se debe dar preferencia a productos en gel.

Cómo escoger un exfoliante para piel oleosa – El producto siempre debe combinar con el tipo de piel y, en el caso de las grasosas, lo ideal es el que contiene ácido salicílico en su fórmula.

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